El pasado viernes 3 de noviembre pasamos algo de miedo. Pequeñas criaturas se acercaron al Huerto de la Villa con la maligna intención de vaciar calabazas y convertirlas en terroríficas lámparas de Halloween. Por tercer año consecutivo nos dejamos arrastrar por la energía contagiosa de nuestrxs amigxs del Centro de Atención Temprana y Tratamientos Psicopedagógicos Iria Intervención y organizamos conjuntamente esta tarde terrorífica.
Entre lápidas de tumbas, algún que otro esqueleto y una oscuridad que se nos echó encima a la primera de cambio, estos pequeños monstruos se lo pasaron a lo grande y nos dejaron momentos increíbles, que nuestro socio David Melchor inmortalizó con ese gusto que tienen las personas aficionadas a la fotografía.
Os dejamos algunas de estas fotos y un enlace para ver muchas más, entre ellas las de quienes no tenemos ese gusto ni habilidad, aunque las hacemos con el mismo cariño.